martes, 16 de julio de 2013

¡Vamos progresando!!

Ya van a ser casi dos meses que terminé la quimio y empecé mi  régimen de nutrición.

El cuerpo es una maravilla, ya voy venciendo ese cansancio abrumador.

Al principio cuando salía a caminar por media hora, volvía a casa y tenía que dormir una siesta de 2 ó 3 horas para recuperarme porque había quedado extenuada. Ahora, he aprendido un truco. Antes de salir a caminar como una fruta dulce para tener energía y no desfallecer. Está dando resultado. La siesta que es obligatoria, todavía, se ha reducido a una hora u hora y media a lo mucho. Es decir ahora puedo hacer algo en la mañana y algo por la tarde.

En cuanto a la dieta para bajar los siete kilos extra, está dando resultado en medidas pero no en peso, si la hacemos caso a la balanza tendría que decir que he subido medio kilo. La nutricionista trató de darme mil razones para no traumarme por subir de peso en vez de bajar… Me dejé convencer con el argumento que señala que mi grasa se está transformando en músculo y eso es lo que pesa… quiero creer que es así.

La idea es eliminar la grasa como medida de precaución para evitar una recaída del cáncer. La nutricionista me ha prohibido tajantemente las gaseosas (yo estuve tomando gaseosa durante la quimio porque me daba energía), me ha permitido comer un poquito de chocolate con tal que deje la gaseosa y los azúcares. Ahora estoy endulzando con estevia. No más enlatados ni comida envasada, todo natural. Puedo comer un pan en la mañana y un carbohidrato en el almuerzo pero por la tarde ya no. Así que bienvenidas las ensaladas y las nuevas recetas que me han entregado.

Ahora ando metida en la cocina, empiezo temprano con el extracto verde y luego del desayuno, dejo todo listo para mi ensalada del día. Con cinco comidas al día, no hay forma de evitarlo. Yo misma he preparado el souflé de alcachofas y el ratatouille con zapallito italiano y berenjenas. Todo sea por comer sano y rico. 

No me quejo, lo disfruto. Pero esto es posible porque, gracias a Dios tengo tiempo libre para hacerlo. ¿Cómo haré después cuando vuelva al trabajo? Tendré que trabajar menos horas para mantener el ritmo.
Pero eso de volver al trabajo lo veo aun muy lejano…



Gracias, Señor, por la sensación de bienestar que acompaña a la recuperación. Tú me diste las fuerzas para superar el tratamiento, ahora me das la perseverancia para salir adelante con la dieta y el ejercicio.

2 comentarios:

  1. Mi querida Rosa Marìa:
    cierto que el cuerpo es una maravilla...y el corazòn ? y tu corazòn es aùn mas maravilloso !!! yo asocio al corazòn: las ganas, la energìa, la voluntad, la fuerza de ànimo, crei que es el motor que necesita nuestra cabecita para salir adelante. Me imagino que estaras harta de escuchar consejos..... asì que no te aconsejo, pero te cuento: YOGA.. es lo màximo... y no es difìcil.... con el yoga aprendes a respirar...simplemente a respirar y a engreir tu cuerpo con la respiraciòn, depositando energìa ahì donde tu quieres. Inclusive hay posiciones en las que aprovechas de la gravedad para que tus articulaciones de acomoden sin el mayor esfuerzo...y en otras, aprendes que relajandote consigues mas de tu cuerpo que creando tensiones.
    La otra cosilla que he decubierto a estas alturas de la vida es que la quinua es lo màximo: alimenta, no engorda y es rica !! ensalada de quinua: quinua graneadita mezclada con huevos duros, albahacao menta, hongos crudos, tomatito, aceitunitas, zapallito italianoy alcaparras si es que hay....mmmMMmmm. Te dejo,que ya me antojè!!!Un abrazo.

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    1. Glenda, gracias por tus consejos. es verdad el yoga es buenísimo. Y gracias por las recetas de la quinua... voy a probarlas.

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