El martes 13 de agosto tengo mi control de los primeros tres meses,
después de la quimioterapia.
Desde hace una semana vengo experimentando todas las formas
de somatización de mis temores y ansiedades. Me dio diarrea sin razón aparente,
se me rajó la comisura de los labios y, lo peor de todo: tengo un cansancio infinito.
Hay días que siento que, si no me echo a mi cama, me caigo. Y, sin más me
desplomo y me desconecto del mundo por un par de horas, con el televisor
encendido, o un buen libro caído de las manos.
Tal vez haya abusado de mi buena condición física. Primero
me fui a Ayacucho, en un viaje relámpago de tres días pero por carretera. Luego
vinieron las fiestas Patrias, de ahí me puse al día con la feria de Libro y fui
en tres oportunidades a recorrerla de un extremo a otro.
Como estoy haciendo dieta vegetariana, tal vez haya
descuidado la alimentación, una cosa es no comer carne y otra nutrirte con
lentejas, frejoles, quinua y demás. Yo he estado comiendo causa, arroz chaufa,
fideos, en fin… Creo que me he descuidado y mi hemoglobina ha bajado.
¿Y cómo sé que me he descuidado? Porque reconozco esta
debilidad. Hasta tengo ganas de comerme una hamburguesa o una carne a la parrilla.
Ayer no aguanté. La situación era extrema. Había llegado de un encuentro con niños
en Pachacámac y tenía que recuperar fuerzas porque tenía un matrimonio por la
noche. Entonces, me debatía entre no pecar pero seguir débil o pecar y
recuperar mis fuerzas.
Rápidamente, cedí ante la tentación de la carne y me
despaché un Lomo a lo Pobre (que vino con arroz, papas fritas, un plátano frito
y un huevo frito). Para no dejar huella me terminé la carne y el huevo
rápidamente y dejé la parte vegetariana para el final, como si mi médico fuera
a aparecer en cualquier momento a hacerme un ¡ampay!
Hoy he vuelto a las lentejas y acabo de tomarme una especie de
ponche de quinua con manzana. Espero sentirme mejor y que de aquí al martes,
(es decir, en dos días) mi hemoglobina suba, porque sino ya me imagino a mi
oncólogo resondrándome por lo de la dieta vegetariana. ¡No quiero ni
imaginármelo!
Señor, gracias por los
alimentos nutritivos que pueden recuperar nuestro estado de salud mágicamente. Gracias
por la quinua, las lentejas, los frijoles, los espárragos, las betarragas y las
frutas secas.
Hola Miski me alegra poder leerte y te siento muy animada de pronto pueden ser los placeres de la carne ja ja ..... que es una bromita por tus pecaditos.
ResponderEliminarEscribí un comentario pero veo que no aparece tendré mas cuidado al enviarlos.
Quiero contarte que mi Hno. Va ya en la tercera quimio de cisplatino y paclitaxel ha perdido mucho peso, y esta bastante irritable creo que ya siente los rigores de la anemia, quería preguntarte si te han dado medicamentos para la anemia y si estuviste muy delgada durante la quimio. Disculpa por estar recordandote pero encuentro afinidad en muchas cosas que te leo . Mil bendiciones y pa'adelante que pa'atrás asustan dice por aqui. Abracitos y gracias por escribir.