domingo, 5 de agosto de 2012

No hay mamografía sin trauma


Trato de evaluar qué es lo peor: ¿la mamografía o el tacto rectal? 

(Y pienso en los hombres – todos ellos cobardes- que no quieren hacerse el examen de próstata por miedo al tacto rectal).

Sin lugar a dudas, la mamografía es peor.

El tacto rectal es solo un momento desagradable. Tome aire, dice el médico y al instante los ojos se te están desorbitando, pero ahí queda todo. A las mujeres nos hacen tacto rectal cuando somos vírgenes y cuando el doctor quiere palpar tus ovarios, tu útero o tu colon. Pero las mujeres sufrimos en silencio y nadie dice nada. Bueno, ir al ginecólogo nunca ha sido divertido para nadie pero ese es nuestro destino.

La mamografía en cambio, consiste en cuatro apachurradas a tus encantos. Dos apachurradas por lado.

El doctor me había ordenado una mamografía bilateral, me aconsejó que pidiera mi carta de garantía con tiempo y yo, lo hice como 30 días de anticipación. Llamé un par de veces para ver que todo estuviera bien y cuando llego al centro médico  me dicen que tengo que pagar un poco más de 120 dólares.  Le explico a la recepcionista que he tramitado mi carta de garantía y que tengo cobertura al 100%, entonces me llevan a un cuartito minúsculo con dos puertas, por una se ingresa y por la otra se sale directo a la zona de tortura.

La enfermera me indica que me saqué todo de la cintura para arriba y me ponga la batita con la abertura hacia adelante. La batita tenía pega-pega para unir los lados y la abertura del medio se unía con unas cintitas que dejaban medio pecho al aire.

Estaba yo en los afanes de taparme con la batita, cuando la recepcionista viene a decirme que tengo que pagar, porque mi carta de garantía ha sido rechazada… No alcancé ni a preguntarle por qué, cuando por la otra puerta aparece otra enfermera  a decirme que ya tengo que pasar.

Yo reclamé:

-Yo no tengo que pagar, yo puedo sacarme una mamografía anual sin costo con mi seguro…

-Pero no le cubre la mamografía 2D o 3D- respondió la enfermera. ¿Y quién ha pedio una 2D?, pensé en silencio.

-Le podemos tomar una 2D por US$ 75 o una 3D por US$ 124… ¿cuál se va a tomar?

-Yo qué sé- atiné a decir, atrincherada en el cuartito- hay que consultarle al doctor. El solo ha puesto mamografía bilateral.

Estaba empezando a decir que me iba a cambiar, cuando la recepcionista vino con la oferta final del doctor:

-Le tomaremos la 3D por el precio de la 2D, incluido no sé qué estudio adicional…

Decidí ser flexible y pagar, pensando que tal vez el doctor quería estar “seguro” de que todo andaba bien con mis mamas y no tener sorpresas.

Antes de que pudiera arrepentirme ya me estaban tomando los datos de la historia clínica:

-Fecha de su última regla…

-En 1997, que me hicieron histerectomía

-Usted  tuvo cáncer de ovario ¿en qué año?

-93

-¿Y le hicieron?

-Quimio

-Y el cáncer de endometrio?

-En el 97

-¿Ahí le hicieron la histerectomía?

-Y ahora su control es…?

-Por unos nódulos peritoneales

-Y le han hecho cirugía y quimioterapia

-Sí

-¿Algun familiar con cáncer de ovario?

-Mis dos hermanas.

-¿Algún familiar con  cáncer de colon?

-Mi mamá

-¿Algún familiar con cáncer de mama?

-Sí, una de mis hermanas

-¡Una que ha tenido ovario y mama??!!

-Sí - respondí con total naturalidad, mientras que daba tiempo a mi mente de procesar que había sido una buena decisión que me tomaran la mamografía 3D por el precio de 2D ¡Una ganga!!!

La enfermera a cargo me oscultó los senos y las axilas y dijo:

-Aquí hay una mama supernumeraria, mientras señalaba con su índice a ese gordito que se forma justo entre el borde del brasier y la axila.

-¡Qué es eso? – pregunté aturdida

-Eso tenemos todos los mamíferos- me respondió secamente- Ya no quise preguntar más porque por fin entendí porque ese gordito nunca desaparecía aunque bajara de peso o hiciera ejercicio.

Luego de aguantar las cuatro apachurradas estoicamente, me indicaron que esperara al médico especialista que me iba a entrevistar, pero al medio minuto me dijeron que ya podía cambiarme.

Entonces vi al doctor que se acercaba diciendo en voz alta:

-Todo está normal, está más que normal ¡Felicitaciones!”

Y normal, nomás me hicieron pagar 75 dólares sin necesidad…


Señor, bendice a los médicos y científicos que desarrollan tecnologías más precisas para el diagnóstico y que pueden salvar muchas vidas con el diagnóstico precoz. Pero protégenos de las enfermeras alarmistas que agregan más terror a un momento, ya de por sí, bastante tenso. 

3 comentarios:

  1. Mañana no lo he olvidado es 13 y quiero desearte que todo vaya perfecto en tu control. Esta noche te estaré encomendando a Dios .Un abrazo

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  2. Felicitación de todo corazón sonrió contigo . Mi Hno. Tiene mañana el tac tenemos toda la confianza puesta en Dios.. Un abrazote Miski Guerrera. Deseo que mis mensajes te estén llegando

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  3. Gracias, Sofía.
    Te leo y pienso en mis hermanas. Ellas me han apoyado muchísimo como tú a tu hermano.
    Eres su ángel.

    Misky

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